Pagar o no pagar la deuda es un falso dilema
( Suplemento Venezuela N° 22 de «El programa comunista» N° 52 ; Diciembre de 2017 )
Unos dicen que no, como por ejemplo la Liga Internacional de los Trabajadores- Cuarta Internacional («morenista») y piden: «suspender inmediatamente el pago de la deuda para poder comer, esa es la salida inmediata para el país» (1). También está, en Venezuela, el grupo trotskista PSL (Partido Socialismo y Libertad) que habla de «... desconocer y dejar de pagar la fraudulenta deuda externa y usar esos recursos para restablecer las importaciones de alimentos, medicinas y los insumos necesarios para reactivar la producción nacional» (1). Veamos.
A comienzos de los años ochenta del siglo pasado, se generó toda una campaña izquierdista por el «no al pago de la deuda», considerada justamente como impagable y un obstáculo al desarrollo de los paises del tercer mundo. En América latina la misma consigna fue respaldada por el mismo Fidel, que debía al «Club de París» no lejos de seis millardos de dólares. En la Habana dicen que nunca pagó. Pero, en aquella época, otros como el diario El País de España decían que había pagado hasta el ultimo centavo, denunciando una campaña demagógica.
Lo cierto es que, siendo una consigna reformista, sin embargo hacen recordar que, para los trabajadores de los grandes paises, la lucha por su emancipación pasa por la denuncia y oposición a las medidas de extorsión y opresión imperialistas de sus paises contra paises menores. Hoy se vuelve a poner a la moda. Nosotros decimos que es un falso dilema, porque si esta lucha contra la deuda «no sustentable» se lleva hasta el fondo no puede sino chocar con el entero edificio del sistema capitalista en su conjunto!
Además, es una reacción típicamente pequeño burguesa, pero también un recuerdo estúpido de aquel movimiento de hace 20-30 años atrás. Pero hoy, ¿qué sentido tiene en Venezuela? Hoy rechazar la deuda, no querer pagarla, como quiso hacer Grecia, significa salirse del sistema financiero internacional, ¡romper de lleno con el capitalismo mundial! Pero esto solo un gobierno proletario anti-capitalista puede hacerlo! Por lo tanto, rechazar la deuda o bien es una frase huera, o bien significa ¡revolución comunista! No hay término medio, no hay tao, que tanto aprecia el reformismo, el «socialismo» de la colaboración de clases, del interclasismo, segundo cuchillo de la política burguesa, enemiga declarada del comunismo revolucionario.
(1) https://litci.org/es/menu/especial/crisis-del-chavismo/venezuela-concesiones-al-gran-capital-hambre-represion/
(2) http://laclase.info/content/el-gobierno-hambrea-para-pagar-hasta-el-ultimo-centavo-de-deuda-externa/
Partido comunista internacional
www.pcint.org